miércoles, 12 de abril de 2023

Cristo, sendero de Vida


 Aquel mismo día, dos de ellos iban caminando a una aldea llamada Emaús,
distante de Jerusalén unos sesenta estadios;
iban conversando entre ellos de todo lo que había sucedido.
Mientras conversaban y discutían, Jesús en persona se acercó
y se puso a caminar con ellos.
Pero sus ojos no eran capaces de reconocerlo.
Él les dijo:
«¿Qué conversación es esa que traéis mientras vais de camino?».
Ellos se detuvieron con aire entristecido.
Y uno de ellos, que se llamaba Cleofás, le respondió:
«¿Eres tú el único forastero en Jerusalén que no sabes lo que ha pasado allí estos días?».
Él les dijo: «¿Qué?».
Ellos le contestaron:
«Lo de Jesús el Nazareno, que fue un profeta poderoso en obras y palabras, 
ante Dios y ante el pueblo; cómo lo entregaron los sumos sacerdotes
y nuestros jefes para que lo condenaran a muerte, y lo crucificaron.
Nosotros esperábamos que él iba a liberar a Israel,
pero, con todo esto, ya estamos en el tercer día desde que esto sucedió.
Llegaron cerca de la aldea adonde iban y él simulo que iba a seguir caminando;
pero ellos lo apremiaron, diciendo:
«Quédate con nosotros, porque atardece y el día va de caída».
Y entró para quedarse con ellos,
tomó el pan, pronunció la bendición, lo partió y se lo iba dando.
A ellos se les abrieron los ojos y lo reconocieron.
Pero él desapareció de su vista.

Lecturas del día: (Hech 3, 1-10) (Sal 104, 1-4. 6-9) (Lc 24, 13-35)

0 comentarios:

Publicar un comentario