Fieles DIFUNTOS
La conmemoración de los fieles difuntos, que sigue a la solemnidad
del primero de noviembre dedicada a Todos los Santos,
tiene sus orígenes en el monasterio Benedictino de Cluny,
por iniciativa del abad Odilón, a finales del siglo X.
Desde allí se extendió a todos los monasterios Cluniacenses,
distribuidos por gran parte de la Europa del Norte.
La Iglesia de Roma la acogió oficialmente en 1311.
El papa Benedicto XV, en 1915, otorgó a cada sacerdote la facultad de celebrar
en este día hasta 3 misas de sufragio: por el celebrante,
el pontífice y por todos los fieles difuntos.
FIELES DIFUNTOS - Fiesta solemne
0 comentarios:
Publicar un comentario