Convertíos a mí de todo corazón

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 «Entonces la mujer se dio cuenta de que el árbol era bueno de comer,

atrayente a los ojos y deseable para lograr inteligencia;

así que tomó de su fruto y comió.

Luego se lo dio a su marido, que también comió.

Se les abrieron los ojos a los dos y descubrieron que estaban desnudos;

y enlazaron hojas de higuera y se las ciñeron».

Lecturas del día: (Gén 2,  7-9; 3, 1-7) (Sal 50, 3-6. 12-14. 17) (Rom 5,  12. 17-19) (Mt 4, 1-11)

I DOMINGO DE CUARESMA